Las virtudes de San Martin de Porres recorrieron todo Lima durante su vida, gracias a eso se fundo la Iglesia de San Martin de Porres, fue considerado un santo mucho antes de su canonización, cada una de sus acciones fueron considerada como divinas por sus devotos.
Durante sus 60 años de vida se le atribuyen muchos milagros y acciones de sanación a través del poder de la oración y su éxtasis de fe, a pesar de ello San Martin era muy humilde y no le prestaba mayor atención a que consideraran que poseía el poder de curar.
Iglesia de San Martin de Porres
Durante la construcción de la iglesia de la Basílica de Santo Domingo, en el lugar donde estaba la habitación de San Martin se construyó la capilla la cual quedo destruido en 1746 y luego con la ayuda de los fieles fue reconstruida en donde se encontraba la enfermería para ser venerado donde descansaban sus restos.
- Esto ocurrió cuando fue declarado santo gracias a los milagros comprobados por el Vaticano, el milagro de Paraguay donde sano a una señora desahuciada por los médicos por una grave condición de su intestino y el milagro de Tenerife donde un niño de tan solo 4 años se le tenía que amputar el pie y en los días siguientes a las peticiones su condición mejoro, gracias a estos milagros se fundo la Iglesia de San Martin de Porres.
Museo de San Martín
Si has visitado la capital de Perú pues debes haber ido a muchos sitios históricos y religiosos, en el centro histórico de la ciudad se encuentra Iglesia de San Martin de Porres, la cual fue convertida en un museo para dar a conocer un poco más sobre la vida de San Martin ya que es muy querido por lo limeños.
- En el primer piso se encuentra la capilla donde puedes orar al santo y sentir el acogedor ambiente de santidad que allí sus creyentes mantienen vivo, mientras que en el segundo piso se encuentra una exposición de su vida muy completa desde su nacimiento hasta su fallecimiento.
- El recorrido ofrece una visión de que su amor a Dios no lo dejo darse por vencido y a pesar de las limitaciones y dificultades de la sociedad clasista de la época que no permitieron ser sacerdote a San Martin, pues el no dejo de servir a Cristo.
- Sus restos descansan muy cerca en la Basílica y Convento de Santo Domingo donde inicio su vida religiosa como un donado, la persona que realizaba la limpieza y quehaceres del convento, aun así esto no lo detuvo para ayudar a quien lo necesitaba.
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