La celebración de febrero del Mes de la Historia Afroamericana en los Estados Unidos se remonta a la década de 1920, pero obtuvo un reconocimiento más formal en la década de 1970, como es obvio con el mensaje del Año del Bicentenario de 1976 del presidente Gerald R. Ford sobre su importancia. Ford describió el Mes de la Historia Afroamericana como una ocasión para “aprovechar la oportunidad de honrar los logros, a menudo ignorados, de los estadounidenses negros en cada área de actividad a lo largo de nuestra historia”.
A pesar de los muchos logros de los objetivos del Mes de la Historia Negra, su narrativa a menudo secular olvida las contribuciones de los católicos negros. En reconocimiento de eso, el Caucus Nacional del Clero Católico Negro de los Estados Unidos comenzó a celebrar noviembre como el Mes Nacional de la Historia Católica Negra hace casi 30 años. No obstante, para promover la conciencia de los logros de todos los estadounidenses negros, es importante promover la conciencia de algunas de las muchas personas católicas que han alcanzado la grandeza frente a la difícil situación del racismo y, en muchos casos, la suprema grandeza de la santidad. Ninguna celebración nacional del Mes de la Historia Negra estaría completa sin incluir estas historias católicas, o las innumerables historias de católicos negros que quedan sin contar.
Padre Jorge Salmonetti es un sacerdote católico dedicado a servir a la comunidad y guiar a los fieles en su camino espiritual. Nacido con una profunda devoción a la fe católica, el Padre Jorge ha pasado décadas estudiando y compartiendo las enseñanzas de la Iglesia. Con una pasión por la teología y la espiritualidad, ha inspirado a numerosos feligreses a vivir una vida de amor, compasión y servicio.